Responsabilidad: Una cualidad en extinción
En la vida existen compromisos que cumplir, tareas que llevar a cabo, y personas a las que responder. Sin importar la situación, todo se resume en una palabra: responsabilidad.
Responsabilidad es quizás una de las palabras más repetidas en nuestra sociedad. Sin embargo, muchos hombres deciden que tal cualidad no es necesaria.
El caso más evidente lo conseguimos en el hombre que abandona a sus hijos, y decide no formar parte de sus vidas. Poco importa si la relación que los generó consistió en una noche de emoción o en años de conflicto. La responsabilidad que tenemos de criar, educar, y estar allí para nuestros hijos continúa estando presente.
Si eres padre, entonces comportate como tal. Punto.
Aunque son muchos los aspectos que pudiéramos mencionar para hablar de responsabilidad en nuestros días, uso la paternidad como ejemplo porque no creo que exista mayor llamado que te empuje a la responsabilidad que el saber que un hijo, sangre de tu sangre y hueso de tus huesos, te necesita y, por voluntad propia, no estás presente.
Si un hombre es capaz de hacer esto, y faltar a una su responsabilidad de manera tan flagrante, entonces, ¿cómo esperar responsabilidad en otros aspectos de su vida?
La falta de responsabilidad se ha convertido en una epidemia en la actualidad.
Ya de por si el machismo en nuestras culturas ha destruido el sentido de compromiso y deber entre hombres, al promover pensamientos y acciones erróneas, infructíferas, y por demás denigrantes. Hemos llegado a un punto donde la falta de responsabilidad en cada aspecto de la vida de un hombre no solo es común, sino esperado. Y entre muchos es, de hecho, promovida.
Así que, lo anterior, me lleva a preguntarme, ¿en qué nos hemos convertido?
Definitivamente, no en Caballeros.
En el mejor sentido, hemos dejado de ser hombres para convertirnos en niños con cuerpos adultos.
Señores, es hora de reaccionar. Es momento de cambiar. ¿Te preguntas porque tu vida no marcha de mejor manera? ¿Por qué no alcanza el dinero? ¿Por qué tu esposa pelea tanto contigo? O ¿porque no tienes alguien con quién compartir tu vida?
Quizás parte del problema es tu falta de responsabilidad ante la vida. La responsabilidad trae consigo beneficios; la falta de ella, genera conflictos porque no existe consistencia en tus comportamientos o persona, y nada en la vida puede crecer sin consistencia.
Pero, ¿qué significa ser responsable en una sociedad donde la irresponsabilidad es lo único que muchos conocemos?
La respuesta puede sorprenderte: Sentido Común.
- Llegar a tiempo al trabajo es ser responsable; llegar un minuto tarde, no lo es.
- Usar el dinero adecuadamente es ser responsable; el despilfarrarlo, no lo es.
- Serle fiel a tu esposa o pareja es ser responsable; ser infiel, no lo es.
- Educar y estar presente para tus hijos es ser responsable; ser un padre ausente, no lo es.
- Crecer a diario en cuerpo, mente y alma es ser responsable; vivir sin propósito, rumbo o plan, no lo es.
- Cumplir tus promesas es ser responsable; no hacerlo, no lo es.
- Ser la mejor versión de ti mismo es ser responsable (este mundo requiere de más Caballeros), el no prestar atención a tu tarea, no lo es.
Aunque nadie nos lo haya enseñado, o no lo veamos a diario, es sencillo entender cómo ser responsable.
Dios nos ha concedido un compás interior para saber qué hacer.
Por lo tanto, Caballeros, es hora de reaccionar y revolucionar los patrones aprendidos y mejorar como individuos para nosotros, nuestras familias, comunidades y sociedad.